martes, 23 de diciembre de 2014

Tres años sin ATC 

La Plataforma convoca a una concentración en Cuenca el 30 de diciembre a las 18h en la Plaza de España, al cumplirse tres años de  la designación de Villar de Cañas para albergar el ATC y exige la paralización del proyecto. El tiempo transcurrido sin avances y las dudas sobre la idoneidad de los terrenos, están a punto de acabar con el ATC. Por su parte, Gil-Ortega (Presidente de Enresa y ex-alcalde de Ciudad Real), se enroca y pretende adjudicar la obra principal del ATC sin permisos


La Plataforma anima a los ciudadanos a que muestren el día 30, su oposición al cementerio nuclear y la falta de consenso. En un momento en el que el ATC está más en entredicho que nunca, la Plataforma se marca como objetivo conseguir la paralización inmediata y definitiva del proyecto. 

Para Job Moya (portavoz de la Plataforma):
“No estamos dispuestos a admitir que Gil-Ortega adjudique la obra principal del ATC, jugando con el dinero público y nuestra seguridad y por ello, nos opondremos de forma pacífica pero contundente. Seguiremos con las movilizaciones y, si hace falta, iremos a los tribunales.
Estamos día a día más convencidos de que, el ATC de Villar de Cañas, pasará a ser solamente una terrible pesadilla. De este mal sueño, la población de la Comarca de Villar de Cañas y toda la Castilla-La Mancha, se está empezando a despertar. Por eso, llamamos a toda la población, a la concentración del 30 de diciembre a las 18h en la Plaza de España de Cuenca”. 

Para la Plataforma, además de que se ha demostrado que los terrenos no son adecuados [1] [2], existe un claro síntoma de que el proyecto del ATC no se realizará en plazo: todas las empresas que generan los residuos radiactivos de alta actividad (las propietarias de las centrales nucleares) tienen almacenes en cada central, o están dando pasos para tenerlos en breve. Por ello, el ATC ya no sería necesario, y provocaría un riesgo innecesario: el transporte de los residuos por todo el territorio peninsular. 

Además, el ATC supondría un derroche de más de 2.700 millones de Euros (de dinero público) en los que está presupuestado el ATC, en toda su vida útil.

Según Moya: 
“La propuesta de la Plataforma es clara: cerrar definitivamente este peligroso proyecto y pensar la opción menos mala para los residuos nucleares, de forma democrática. Pero antes, hay que poner un calendario de cierre a las nucleares para dejar de producir estás sustancias que tantos quebraderos de cabeza están produciendo a los técnicos y a los políticos.
A la vista de la tremenda chapuza que ha supuesto pretender colocar un cementerio nuclear por motivos políticos en Villar de Cañas, antes de comprobar la idoneidad de los terrenos, Gil-Ortega (presidente de Enresa), José María Saiz (Alcalde de Villar de Cañas) y María Dolores de Cospedal, tendrían que dejar su puesto”.