miércoles, 19 de agosto de 2020

La Plataforma registra sugerencias al trámite ambiental del 7º Plan de residuos radiactivos

La Plataforma Contra el Cementerio Nuclear en Cuenca ha presentado un amplio documento con sugerencias sobre múltiples aspectos no recogidos en el documento de inicio estratégico

La construcción de un ATC sigue siendo la principal opción de Enresa para el almacenamiento intermedio de los residuos radiactivos de alta actividad

Con un retraso de siete años, por fin el gobierno inició en marzo,  los diferentes procedimientos  para la aprobación del “7º Plan General de Residuos Radiactivos” (7ºPGRR). Hay que recordar que La Comisión Europea ha apercibido al Reino de España con una sanción por no disponer de un plan de gestión de residuos radiactivos.

En junio, se inició el periodo de “sugerencias previas” el “Documento de inicio estratégico” (DIE) [1] que ahora ha recibido la contestación de la Plataforma [2].

Pero a pesar del retraso, lo primero que ha llamado la atención a la Plataforma es que el borrador del 7º plan es casi idéntico al anterior y sigue planteando como única solución al almacenamiento intermedio, la construcción de un ATC. Esto significa que, en caso de aprobarse el plan en la actual redacción, el ATC de Villar de Cañas puede ser designada para albergar el ATC.

Otro aspecto llamativo es que el DIE, sí que plantea otra solución para el almacenamiento intermedios de los residuos radiactivos de alta actividad (RAA) y el combustible nuclear gastado (CG). A esta solución la denomina “Almacenes temporales descentralizados” (ATD) pero sin precisar su número o ubicación.

Las sugerencias de la Plataforma van en la línea de descartar el ATC por innecesario y más impactante y defiende la alternativa de 7 almacenes temporales en la misma ubicación de las centrales nucleares. También, sugiere que se evalúe por separado tres alternativas: un ATC, tres ATD y siete ATD/ATI.

María Andrés (portavoz de la Plataforma) ha declarado: “A pesar del tiempo transcurrido, tenemos la sensación de estar de nuevo en 2010: a la espera de la decisión del gobierno sobre la ubicación del ATC. Parece que los 10 años transcurridos no han servido para que la empresa pública que gestiona los residuos radiactivos (Enresa) repiense su plan, puesto que la aventura del ATC en Villar de Cañas es evidente que ha fracasado y se ha llevado por delante decenas de millones de Euros y buena parte de su prestigio. Pero Enresa, lejos de hacer autocrítica sigue sosteniendo su modelo de gestión a pesar de la fuerte contestación social y política”.